Bohemian Club y su Bohemian Grove en Prensa.

En un principio el Bohemian Club que se fundó en la década de los 70 del siglo XIX de mano de Mark Twain y Henry George, entre otros, era un Club de artistas, cosa que en un principio consiguió, con los años el nombre de dicho Club empezó a dejar de tener sentido, tal vez porque lo que más llamaba la atención del club, no era el arte sino su propiedad el Bohemian Grove. Llama la atención, que la mayoría de los libretos de los que tenemos constancia vayan de lo mismo, dioses paganos, sacrificios, inmortalidad, misticismo, magia, etc.

En esta entrada vamos a ver varios artículos en prensa que hablan del Bohemian Club, del que la mayoría de la gente solo conoce lo que Alex Jones nos ha contado y grabado.

Es muy difícil encontrar artículos sobre el Bohemian Club o su arboleda en español, así que en ese aspecto he hecho lo que he podido, aun así, como ya se ha hecho en anteriores ocasiones cono con el Nuevo Orden Mundial o Los Rothschild, se publicará próximamente un listado de artículos y noticias sobre este tema.

The San Francisco call., el 25 de marzo de 1900 decía entre otras cosas que el Club Bohemio, se había convertido en un popular medio para la proyección de obras de los pintores locales,  y también que estaba desviando la tendencia de la moda en el gusto y la apreciación de los sujetos locales. Leer aquí.

El 18 de Diciembre de 1904 en el New York Tribune podemos leer una amplia noticia sobre el Bohemian Club en la que podemos leer cosas como: 

"El Bohemian Club, de San Francisco, cuya fama es mundial entre los autores, artistas y actores, es notable en varios aspectos, pero la característica que resulta más atractiva para los que viven más allá de los límites de California es la propiedad del club, un bosque de secuoyas gigantes cerca de San Francisco, que le permite una vez al año mantener su "travesura" veraniega en un gran anfiteatro natural, cuyas paredes son los enormes troncos peludos del bosque primaveral."

"Durante treinta y dos años, el Club Bohemio fue organizado por una docena de periódicos de San Francisco en vías de recuperación y abogados. Creció rápidamente, el número de miembros que se incrementó desde 200 hasta 400, luego a 500, y finalmente a 600. En la actualidad existe una larga lista de espera de solicitantes cuya única posibilidad de ingreso en Bohemia se encuentra en la muerte o renuncia de los miembros presentes."

Como veis no dice nada de que el Club lo organicen artistas sino periodistas y abogados. 

"Durante un cuarto de siglo todos los visitantes de San Francisco, famosos en la literatura, el arte o en el escenario han sido invitados a una cena en el Club Bohemio, y la mayoría de estos hombres han enriquecido el club con algún recuerdo que tiene interés histórico o literario."

"Las "travesuras" que comenzaron como un entretenimiento adecuado en el bosque, ahora consisten en una
máscara, o juego, escrito por algún miembro del club y organizado y representado por los demás. Todo el trabajo se lleva a cabo por los miembros, y algunos de los espectáculos han sido notables por sus efectos artísticos. Entre ellos se puede mencionar el Buda, travesura organizada por Fred W. Somers, cuando un gigante del gran ídolo japonés formó el centro de extraños ritos teosóficos, Los druidas travesura, diseñada por Joseph D. Redding, ahora en Nueva York, a la que el bosque de la gran arboleda prestó una espectacularidad adicional ..."

El artículo se puede consultar entero en la página enlazada y siguiente.

En el Goodwin´s weekly a thinking paper for thinking people (Semanal de Goodwin un pensamiento de papel para la gente pensante) del 11 de marzo de 1905, se puede ver una reseña, que habla de las cenas a las que una vez al año el Bohemian Club, invitaba a artistas, músicos y escritores cómo veíamos en la noticia anterior. Acceder aquí.

En The Times Magazine, del 6 de Mayo 1906, hablan también ampliamente del tema, al parecer una gran catástrofe (incendio) había asolado San Francisco, pero según The Times, lo que más preocupa es alguna pérdida sufrida en el San Francisco Bohemio. Sobre el club, cuentan varias cosas.

"Y por último pero no menos importante, está el Club Bohemio, "Bohemian Club de San Francisco", famoso en todo el mundo, fue organizado en 1872 por iniciativa de tres hombres de prensa, José NH Irwin, en ese tiempo director comercial del examinador, Sands W. Forman, jefe de redacción del Examiner, y Thomas Newcomb, editor de la ciudad de la convocatoria. Desde sus modestos comienzos creció, y creció, hasta convertirse en uno de los clubes más prósperos y famosos del mundo ...."

“Los bohemios de los pequeños restaurantes acostumbran a quejarse con amargura de que el club bohemio ha perdido mucho de su carácter original, que en definitiva ya no es bohemio. Dicen que ha adoptado una gran cantidad de millonarios, porque, en verdad, necesitaba el dinero, y que los millonarios han hecho de este un asunto de traje de etiqueta, y cuentan entre lágrimas la forma en que Jack London se opuso a su entrada, en torno a la ropa negligé "y se llaman a sí mismos bohemios "...”

"Él tiene el alma y el artista y una vez al año se va a este bosque bajo la luna llena y llena esa alma con la majestuosidad de un color intenso y fuerte como un funeral."

Al parecer el Bohemian Club a sufrido daños, y se está reconstruyendo. Leer aquí.

En La Vanguardia del 5 de mayo de 1906, se asegura que la casa del novelista Stevenson se ha salvado, gracias a los socios del club bohemio, como se ve al principio de la tercera columna de la página enlazada.

El 31 de Julio de 1941 el San José Evening News, informaba sobre la presencia de los miembros del club bohemio, en la arboleda bohemia, para su travesura anual. Y citaba entre los asistentes al Dr. Charles Everett More, Chester Herold, William Higgins, Thomas Eagan y True Tourtillot. Información aquí.

El Eugene Register-Guard del 31 de julio de 1964, se hacía eco de la asistencia del candidato republicano Goldwater a la reunión anual en Bohemian Grove. Bajo el titular Coldwater comienza vacaciones en California, contaba que Barry Goldwater comenzaba sus vacaciones antes de la Campaña para codearse con los notables hombres que se reunían en el campamento anual de Bohemian Grove.

El senador de Arizona fue invitado por el ex presidente Herbert Hoover. También se señala en la noticia que el descanso y el relax estaban a la orden del día en la arboleda seguidos por una charla en el conjunto de cierre de la excursión anual.

Goldwater voló desde Washington aterrizando en Santa Rosa y fue recibido por el General Albert C. Wedemeyer (retirado) y por Herbert Hoover Jr. Conduciéndose todos inmediatamente a la arboleda.

El senador había insistido en que su fiesta californiana sería privada y sin estridencias, eludiendo a los periodistas en Washington. Sin embargo, cuando descendió del Convair turbohélice, le esperan los reporteros y fotógrafos. Hoover sugirió que Goldwater podría querer hablar con los periodistas, a lo que el senador respondió rápidamente, “No, no habrá ninguna conferencia de prensa”.

El periódico afirma que el ex presidente Hoover y otros, son los que han ayudado a que la arboleda se haya convertido en un encuentro anual de los nombres más importantes en todos los campos de todo el país. Noticia aquí.

El 10 de octubre de 1974, The Lewiston Daily Sun, publicaba un artículo bajo el titular “Bohemian Grove, La fiesta de los hombres más grandes de la tierra”, entre otras cosas dice que muchos recuerdan Bohemian Grove, por un incidente que implicaba a Nixon en 1971 que fue miembro del Club Bohemio desde 1953. Nixon debía mantener en secreto que se encargaría de dar la Charla anual a la orilla del lago del campamento, como ya había hecho Nelson Rockefeller en 1963 o el presidente Herbert Hoover en otra ocasión. Pero la noticia de que Nixon iba a perderse en un bosque de secuoyas a dar una charla confidencial a algunos de los hombres más poderosos de América, llegó a oídos de los reporteros que cubrían la Casa Blanca y amenazaron con cubrir el evento por la buenas o por las malas. Por lo que los lideres del club pidieron a Nixon que cancelara su aparición. La Casa Blanca anunció la cancelación.

Según Domhoff, Nixon envió un telegrama preguntando al presidente del club si podía continuar liderando a la gente en el bosque, y afirmó que él a su vez llevaría a la gente fuera de peligro.

Nixon escribió “Cualquier persona podría aspirar a ser presidente de los Estados Unidos, pero sólo unos pocos podrían aspirar a ser presidentes del Bohemian Club”

El artículo también habla sobre el primer evento importante de la reunión anual de Bohemian Grove, “La cremación de la preocupación”, que es seguida de la cena en 1500 largas mesas iluminadas por las normas del fuego.

Según Domhoff, “cuando las sombras se acercan desde las laderas, llegan los bajos sonidos tristes de un canto fúnebre, a medida que giraba la cabeza en su dirección vi débilmente las siluetas de hombres vestidos con capuchas rojas puntiagudas y túnicas rojas.”

Después sigue el ritual de la quema simbólica de la preocupación, traducida en: la responsabilidad, la rutina, la tensión. Un ataúd que contiene un cuerpo de muselina negra envuelto alrededor de un armazón de madera que se quema. Un evento que la membresía se toma muy enserio y que podía costar en esa época de 20000 a 30000 dólares. Lee aquí.

Y aquí dejo la noticia de 1971 que informa de que Nixon canceló su charla privada.

En La Vanguardia 1980 Jorge Edwars en Notas Californianas, narra como su amigo Vicente Urbistondo le presenta a Mike Raffeto, el cual es miembro del Bohemian Club y les invita a almorzar allí, ofreciéndose a contarles la historia del Club, según su versión. Me pregunto qué habrían pensado, los Bohemios a los que se les hizo el vació casi 80 años antes, de la bondad que atribuye a los socios más adinerados. Acceso aquí.

El 25 de julio de 1982 nos encontramos con el Bohemian Grove, en una noticia que en principio no tendría porque estar relacionada, sobre todo para los que afirman que el Bohemian Club, es tan solo un club dedicado al arte.

Una crisis internacional estallaba a cuenta del gasoducto siberiano, y el canciller alemán Helmut Schmidt, veía sus vacaciones frustradas. ¡Qué causalidad! Que Schmidt y el por entonces secretario de Estado norteamericano, George Shultz, se encontraran para discutir el tema en un lugar que La Vanguardia tildaba de poco convencional, ese lugar no era otro que el Bohemian Grove, del que se dice en la noticia no admite ni mujeres ni periodistas.

En dicha fecha, estaba prevista la travesura anual del Bohemian Club, que La Vanguardia llama cumbre y en la que dice que participan también otras altas figuras de la vida política y económica del país, y afirma que dicha “cumbre” vista originalmente como un acontecimiento social, se había convertido en una oportunidad para tratar a fondo las divisiones surgidas entre Europa y Estados Unidos. También se afirma en el artículo que el canciller germano y el secretario de estado estadounidense, tuvieron la oportunidad de conversar sobre el tema con otros invitados al Bohemian Grove, entre los que destaca a Gerald Ford y Henry Kissinger.

En el artículo se explica que el Bohemian Grove es una especie de campamento de verano para políticos, donde alternan la asistencia a conferencias con excursiones en canoa, marchas a pie para cazar mariposas y lujosas cenas preparadas por los mejores “maitres”.

El ministro norteamericano de Defensa, Caspar Weinberger, tenía previsto acudir al Bohemian Grove, pero tuvo que avisar a última hora de su no asistencia, por si hubiese necesidad de tomar decisiones urgentes. Noticia completa aquí.

En 1984 bajo la firma también de Jorge Edwards, se habla de diferentes Clubs, bajo el titular Vida de Clubs, llegando al Bohemian Club, lo trata de paradójico, ya que no queda ni un solo Bohemio entre sus filas, leer vosotros mismos

El 23 de julio de 1984, The Spokesman Review, informaba de que al menos 21 manifestantes eran detenidos cuando trataban de bloquear la entrada de Bohemian Grove, entre cuyos miembros se encontraba el por entonces presidente Reagan.

Los manifestantes protestaban por la conexión de los miembros con la investigación de armas nucleares, por los acuerdos políticos y comerciales que allí se realizan y por la exclusión de las mujeres en la membresía del club. La noticia aquí.

En junio de 1992 el Lakeland Ledger, publicaba un artículo de Jack Anderson, que se centra fundamentalmente en denunciar a los ejecutivos de los medios de comunicación que asisten a Bohemian Grove.

Titula el artículo: “Los ejecutivos de los medios de comunicación afectadas estrellas.” Y lo subtitula: “Las actividades en Bohemian Grove, escapan al escrutinio.”

Anderson asegura que un círculo exclusivo de los principales miembros de la prensa nacional, se mezcla con los funcionarios gubernamentales de alto nivel y las cabezas prominentes de la industria en las reuniones anuales de la arboleda. Pero advierte que a pesar de que dicho círculo está en el negocio de la venta de información, no esperemos que rompa jamás la regla de oro de la Arboleda: “No reproducir o publicar scripts, imágenes, música o relatos de la arboleda.”

Destaca que personajes de la talla de George Bush, Henry Kissinger, Ronald Reagan y al presidente de IBM John Akers son conocidos por presentarse a las dos semanas bañadas en licor de camaradería al aire libre. Pero el verdadero interés de Anderson es apuntar directamente a figuras como William F. Buckley Jr, al por entonces ya fallecido Malcolm Forbes y a los ejecutivos de The Los Angeles Times. A los que acusa de sentir más lealtad hacía el Bohemian Club, que a su propio negocio.

Jack Anderson, aseguraba, que en los años anteriores a 1992, al menos una docena de historias que exponían algunas de las relaciones y rituales de Bohemian Grove, escritas por periodistas de investigación empleados por miembros de la arboleda, se habían clavado o alterado antes de su publicación. Y relata el caso de Dirk Mathinson, ex jefe de la revista People, quien consiguió permiso de un jefe para escribir una historia sobre la arboleda si podía infiltrarse en el campamento de verano, en 1991. Durante tres días consiguió burlar la estricta seguridad alrededor del campamento, pero a la tercera fue la vencida y fue descubierto por un ejecutivo de Time-Warner, quien inmediatamente le tocó y lo expulsó del campamento airadamente. Pero la cosa no quedó ahí, antes de que la hubiera terminado, la historia de Mathinson fue retocada por al menos un ejecutivo de Time-Warner, viejo miembro fiel de la arboleda. Pero la sorpresa fue mayor, cuando Time-Warner decidió cerrar su oficina de San francisco donde era jefe Mathinson, con la excusa de los recortes de personal, a pesar de que la oficina de San francisco fue una de las más productivas de People. Un año después Mathinson no tenía trabajo.

Esto entre otras cosas contaba Jack Anderson en 1992.

Cabe reseñar que pocos meses después de la muerte de Anderson (2005), el FBI trató de obtener acceso a sus archivos como parte del AIPAC, basándose en que la información contenida podría perjudicar a los intereses del gobierno de EEUU.

En The Press Democrat el 25 de Julio de 2008, encontrábamos en portada el siguiente titular: “Bohemian Grove, campamento de verano para poderosos.”, bajo el mismo se explicaba como George W. Bush, fue presentado en 1995 por su padre George H.W. Bush, ante los miembros del Bohemian Club, aprovechando la finalización de la estancia anual de dos semanas en la arboleda bohemia.

Al parecer, el 29 de julio de 1995, el expresidente se paró al lado del pequeño lago rodeado de secuoyas y habló a cientos de hombres ricos y poderosos en Bohemian Grove. Allí, Bush, un viejo miembro del Bohemian Club, presentó a su hijo a la multitud de hombres de negocios estadounidenses, pesos pesados profesionales, sociales y políticos.

Según la crónica de G. William Domhoff que tituló “La élite del poder en el Campamento de Verano” George H.W. Bush aprovechó la ocasión para decir que su hijo sería un gran presidente algún día.

La portada de The Press Democrat, aprovecha para servirnos en bandeja lo que llama Teoría de la Conspiración, sugiriendo que solo habría que conectar este evento con la ascensión de George W. Bush a la Casa Blanca, en el año 2000. Y continua el festín recordando que el ex presidente Richard Nixon, en sus propias memorias, reflejó que junto a la orilla del lago de la arboleda, habló con los bohemios afirmando que dicho momento de 1967 “marcó los primeros hitos en mi camino a la presidencia” que ganó el año siguiente.

Nixon, en lo que el periodista tacha de un estado de animo menos caritativo, se quejó en sus cintas secretas de que el Bohemian Club “es la maldita cosa más marica que te puedas imagina”

El periódico termina diciendo que si las anécdotas presidenciales demuestran que los bohemios, mientras pasean y se emborrachan entre secuoyas de más de 1500 años planean el futuro del mundo libre, entonces este está sujeto a debate.

Leer aquí la portada, que informa de que hay más información relacionada en la página A4.

El artículo anterior informaba al final de que ese año, el 2008 al acabar el campamento, el club de San Francisco se encontró envuelto en una controversia local, a causa de un plan de tala propuesto para el retiro de 2700 acres de arbolado.

Pero al parecer tanto el Club Bohemio como el editor de The Press Democrat, ya sabían de tal controversia meses antes, ya que en abril de ese mismo año, el editor publica una respuesta a una carta del presidente del club, bajo el titulo Salvemos el bosque, en el que le responde lo siguiente:

Nadie se opone a la eliminación de las maderas duras muertas de la arboleda bohemia para reducir el peligro de incendio. Esta actividad tiene sentido y no requiere un permiso del estado. El Bohemian Club se ha embarcado en un programa de este tipo, uno que no está relaciona con la solicitud de registro actual.
 
El Bohemian Club busca ganar derechos perpetuos para resgistrar 1,1 millones de pies tablares de madera roja y de abeto al año. La tala de estos árboles no va a reducir el riesgo de incendio. El Bohemian Club está utilizando el fuego como una táctica de miedo para justificar la tala comercial pesada. Respuesta aquí.

Para quien necesite o quiera indagar más sobre estos temas, puedes leer el libro de Esteban Cabal,  pinchando aquí puedes acceder ampliamente a extractos del mismo y aquí lo puedes comprar online. podrás conocer más y de forma más estructurada.

(María Jort "Desiluminate")